Los Valores del Camino en 12 meses, hablando de las manos de Mocho, un verdadero símbolo de la amistad en la peregrinación a Santiago.
Ni se compran ni se venden. Se dan a aquellas personas que te encuentras en el Camino y te marcan. Y se entregan en medio de las manos en el momento de estrecharlas.
No tienen valor monetario. Pero desde el año 1999 se han repartido más de ochocientas mil. Su artífice es José Sanchís, más conocido como Mocho, natural de Onil (Alicante), “la cuna de las muñecas”. Precisamente en una de esas fábricas de sueños infantiles –la de Famosa- trabajó toda su vida. Y de ahí, su afición por fabricar estas pequeñas figuras que llenan de camaradería el Camino.